Páginas

miércoles, 16 de marzo de 2016

Como cuantificar un entrenamiento (Obtener su magnitud)

Cuando nos proponemos un reto generalmente nos solemos preparar para afrontarlo lo mejor posible, y dentro de esa preparación el entrenamiento suele ser una gran parte. El entrenamiento puede estar orientado a obtener una mejora técnica, una mejora física o ambas a la vez. La programación del entrenamiento requiere ir aumentando la carga a medida que se acerca la fecha del objetivo.
¿Pero como definimos la carga de un entrenamiento?
Las sensaciones son algo muy subjetivo y cambiante y están sometidas a variables como la meteorología, la hora del día a la que se entrena, si se ha dormido bien, si el día anterior fue un día de mucha carga física,... y ademas no ofrecen ningún valor definido con el que trabajar.

Para realizar una valoración objetiva del entrenamiento se necesitan datos numéricos con los que trabajar. Los deportistas de élite realizan pruebas de esfuerzo con mayor frecuencia que los aficionados y tienen así mas y mejores datos con los que cuantificar y organizar sus entrenamientos.
Los aficionados podemos realizar una buena organización con el uso de un aparato tan simple como un pulsometro o cardiofrecuenciometro. Existen varias marcas y muchos modelos en el mercado, con multitud de funciones. En otra ocasión hablaremos mas extensamente sobre pulsometros. Lo indispensable es que ofrezca el dato de la frecuencia cardíaca media durante el ejercicio.

Para cuantificar la sesión de entrenamiento vamos a usar dos datos:
  • Fc media, esta relacionada con la intensidad del ejercicio.
  • Tiempo (en minutos), sera el volumen del ejercicio.

Las formulas que vamos a usar son las siguientes:

INTENSIDAD =  (Fc media/Fc max) x 100

VOLUMEN = Tiempo (en minutos)

MAGNITUD = INTENSIDAD x VOLUMEN

Con los valores de la magnitud podemos programar cuales son los días de mayor carga y cuales son los días de recuperación. Haciendo un gráfico como el siguiente se obtiene una interpretación mas visual de la magnitud de las sesiones de entrenamiento. 
 En la imagen puede verse un ejemplo de planificación semanal del entrenamiento, concretamente este es el modelo que he utilizado yo durante el pasado otoño para preparar la temporada de esquí. Se ven dos máximos semanales bien separados entre si para asegurar la recuperación. No olvidar que la recuperación es tan importante como el ejercicio en si.

No hay comentarios:

Publicar un comentario